En el libro “25 años de Informática Educativa en México, miradas de líderes y pioneros” (Vicario 2009) publicado por el ILCE, SOMECE y la UNAM se hace un recuento de nuestra vocación tecnológica como país en el rubro educativo, particularmente como desarrolladores de software educativo, y más delante de plataformas informáticas para la educación, bibliotecas digitales, recursos multimediales y ahora contenidos para ambientes virtuales y a distancia. Vocación que nos recuerda importantes proyectos que han trascendido nuestras fronteras como son Prometeo, Descartes, EVA, Sofía, SIABUC, el software del grupo Galileo, el del Libro Electrónico y más recientemente Enciclomedia. No obstante, a cinco años de ese recuento algunos de éstos líderes y pioneros que se encontraban reunidos en el marco del Primer Simposio de Innovación en la Enseñanza de la Educación Básica usando nuevas tecnologías realizado el 4 y 5 de Diciembre del 2014 en CINVESTAV Guadalajara, integraron una mesa de trabajo de manera espontánea donde se analizó el avance en torno a los desafíos identificados y se precisó, entre otras propuestas, la urgencia de organizar de mejor forma los capitales (talento, mejores prácticas, recursos) con que contamos como productores de Tecnologías para la Educación a fin de dar impulso a una agenda nacional que permita de conjuntar los esfuerzos, infraestructura y talento. Posteriormente y derivado de dicha sesión de trabajo durante 2015 se realizaron 4 reuniones más de trabajo a distancia donde se sumaron otros líderes de producción e incorporación de tecnología en los estados con quienes se sentaron las bases conceptuales y organizativas para desarrollar una comunidad nacional enfocada a impulsar acciones de producción con mayor calidad y en forma articulada